Ya podemos hablar de la nueva consola de Sony y además en este caso te recordamos que la que estás a punto de leer se puede considerar como una review inicial, ya que volveremos a este tema en las próximas semanas. La PlayStation 5 estará disponible oficialmente a partir del 19 de noviembre en 499 € para la versión con lector óptico -la que revisamos- y 399 € la versión digital.
Diseño
Empecemos por el diseño, la PlayStation 5 se creó siguiendo una filosofía completamente diferente a la de su rival directo. La PS5 es la consola más grande jamás creada, sus dimensiones son realmente notorias (390 x 104 x 260 mm y 4,5 kg de peso para el modelo con lector, 390 x 92 x 260 mm y 3,9 kg para digital).
Este no es un detalle menor a tener cuenta antes de decidir cual comprar, ya que puede que no sea fácil colocarlo en estantes y gabinetes estrechos, o al menos no es obvio que se pueda colocar en el mismo espacio que ocupaban anteriormente la PlayStation 4 y PS4 Pro. A las importantes dimensiones se une un diseño indudablemente extravagante.
También en este caso Sobny ha tomado decisiones diametralmente opuestas a las de Microsoft, si la Xbox Series X tiende a mezclarse y desaparecer en el salón (gracias a su forma que le permite disfrazarse más fácilmente), la PlayStation 5 en cambio tiende a imponer su presencia sin preocuparse por llamar la atención.
Como todos sabemos, la consola consta de tres elementos estéticos principales, las dos placas laterales, un color blanquecino, y el cuerpo central negro. Este último tiene un acabado brillante en la parte delantera, mientras que en la parte trasera se vuelve mate y adopta una forma que recuerda a la primera versión de la PlayStation 4.
La parte brillante es sin duda la que más se presta a los rayones y a hacer evidente el paso del tiempo (solo piensa en todos esos micro-rayones que se pueden crear por la inserción incorrecta de un dispositivo USB).
Ruido y disipación de calor
En lo que al ruido se refiere, la PlayStation 5 ha logrado un progreso significativo en comparación con la PS4 y PS4 Pro, finalmente es posible jugar sin tener ese molesto ruido de fondo causado por el ventilador. En el caso de la PS5 la prueba de la consola se llevó a cabo utilizando tanto Astro’s Playroom como Spider-Man: Miles Morales.
Ambos son títulos diseñados para explotar el hardware de la consola de una manera más intensa que los juegos de PS4 (en en cualquier caso, iniciar The Last of Us Part II no implica la activación del modo Boeing 747), pero la prueba final es Demon’s Souls Remake, ya que es capaz de exigir las necesidades de la consola de próxima generación.
Por tanto, la PlayStation 5 es mucho más discreta que PS4 Pro (también gracias a la eliminación del disco duro mecánico con el que estaba equipada), no llega a los picos de silencio tocados por la Serie X, pero se puede considerar más cercana a One X, si estamos a un metro de la PS5 se puede percibir que está encendida y en funcionamiento.
En resumen, un gran trabajo en este ámbito, considerando de dónde venimos, pero eso probablemente ofrece más margen de mejora con las próximas pruebas. Sin embargo, definitivamente se acabaron los tiempos en los que era necesario jugar con unos auriculares para aislarse del ruido que producía la consola.
Siguiendo con el tema de la disipación, la solución estudiada por Sony no se ve afectada por la orientación de la consola, por lo que se puede utilizar la PlayStation 5 tanto en vertical como en horizontal sin que esto afecte a las capacidades con las que se gestiona el flujo de aire interno.
Especificaciones técnicas de la PlayStation 5
- Procesador:
- AMD Zen 2 de 7 nanómetros, octa core con 16 hilos
- 8 núcleos a 3,5 GHz
- Procesador gráfico:
- Chip personalizado basado en hardware RDNA2
- 10.28 TFLOP
- 36 CU a 2,23 GHz
- Admite una resolución de hasta 8K
- Soporte para ray-tracing
- Memoria:
- SSD personalizado de 825 GB (5,5 GB/s in RAW, 8/9 GB/s típico)
- Memoria expandible mediante puerto dedicado
- RAM: 16GB GDDR6 256 bit @ 448 GB/s
- Lector óptico: Blu-Ray Ultra HD
- Audio: “Tempest” 3D AudioTech
- Compatibilidad con versiones anteriores:
- Admite juegos de PlayStation 4
- Es compatible con el visor PSVR (necesita el adaptador para la cámara)
- Controles:
- DualSense con disparadores dorsales (L2 / R2) con resistencia variable
- Feedback háptico para vibración
- Touchpad
Control Dualsense
Pero vayamos a la verdadera estrella de esta review, el nuevo control DualSense. Como se destaca en la comparación entre las distintas PlayStation, el DualSense representa un cambio radical en el diseño del último pad de Sony. Excluyendo las nuevas líneas, las verdaderas novedades radican en las características soportadas.
También en cuanto al feedback que nos puede brindar durante la interacción en los juegos. En cuanto al primer aspecto, el DualSense integra un micrófono que te permite participar en chats de voz de forma inmediata, sin necesidad de utilizar unos auriculares con micrófono, como sucedía en PS4.
La introducción de este componente implicó la adición de un botón dedicado a desactivarlo; simplemente presiónelo una vez para que aparezca la luz naranja, lo que indica que el micrófono está bloqueado. Las teclas son mucho más silenciosas que las del DualShock 4 y el mando de la Xbox, por lo que su ruido no debería percibirse al utilizar el micrófono.
Volviendo en cambio a las funciones del DualSense, hay dos que más lo distinguen de la competencia y de todos sus predecesores, la vibración háptica y la variación de resistencia de los botones L2 y R2 (cuya intensidad – para ambos – puede ser cambiada por la configuración).
La experiencia sensorial que ofrece el DualSense lo coloca por encima de todo lo que haya probado antes, ya que, por primera vez, podemos elegir una pieza de hardware capaz de devolvernos la retroalimentación táctil. lo que está sucediendo en la pantalla.
En conclusión
En general, PlayStation 5 es una plataforma de próxima generación muy prometedora y de inmediato logra hacernos entender cuál es el camino tomado por la casa japonesa. La próxima generación aún está lejos, a pesar de que las consolas ya están aquí, precisamente por la falta de experiencias dedicadas exclusivamente a las nuevas plataformas, que por lo tanto pueden resaltar el salto generacional.
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