El Wolverine Ultimate es la apuesta de Razer por crear un control de nivel profesional Xbox One para eSports y jugadores competitivos. A primera vista, puede parecer que no ofrece mucho más que el control oficial Xbox One Elite, que es un poco más barato. Sin embargo se puede confirmar que es uno de los mejores en el mercado, si puede soportar la falta de funcionalidad inalámbrica.
No se equivoque, cuando se trata de rendimiento, el Razer Wolverine Ultimate es uno de los mas responsivos de los controles para juegos, y perfecto para serios jugadores de consolas y PC. Simplemente tendrá que pagar por la nariz el privilegio de ser dueño de ella.
Razer Wolverine Ultimate – Diseño
El Wolverine Ultimate se parece a una versión de la era espacial de un controlador regular de Xbox One. Pero en la mano es una bestia completamente diferente.
Para empezar, hay iluminación Chroma RGB en su parte delantera y botones de carga de cobertizo más que un controlador Xbox regular. Específicamente, en su parte posterior encontrarás dos paragolpes re-mapeados y cuatro gatillos adicionales. El paquete completo proporciona una mayor cantidad de teclas programables para jugar que Xbox Elite, que admite un máximo de cuatro paletas traseras adicionales.
En la parte inferior, encontrará un panel de control rápido de cuatro botones que le permite cambiar presets, modos de luz RGB y activar o desactivar el micrófono y el audio del juego. Las asas traseras tienen un acabado ligeramente texturizado y texturizado que te permite obtener un agarre más sólido que un control Xbox One regular, incluso cuando has ajustado los dedos para cubrir los controles adicionales.
Razer Wolverine Ultimate: software y rendimiento
El Wolverine se puede programar en parte usando sus controles físicos, pero para aprovecharlo al máximo tendrá que usar el software Synapse de Razer. Synapse está disponible para PC y Xbox One, y ofrece un conjunto de funciones bastante idéntico en ambas plataformas, aunque la versión para PC tiene una interfaz de usuario ligeramente más intuitiva.
Puede crear hasta 500 perfiles, con configuraciones específicas para las teclas adicionales, iluminación RGB, sensibilidad de joystick y niveles de retroalimentación háptica. La idea es que, como un teclado y un mouse para juegos, puedes configurar el Wolverine para que funcione con el sistema de control de un juego.
Los botones X, Y, B, A muestran una respuesta significativamente más rápida y un clic agradable que los hace sentir más como una tecla mecánica del teclado que como un botón del gamepad. El resultado final es uno de los gamepads más receptivos que he probado.
En conclusión…
Con controles maravillosamente receptivos, una gran cantidad de teclas personalizables y paletas, y un diseño resistente que sobrevivirá el lanzamiento ocasional de ira, el Wolverine Ultimate es una compra perfecta para cualquier jugador competitivo de PC o Xbox One.