Cuando tu móvil es nuevo, generalmente es ágil y receptivo. Sin embargo, comenzará a sentirse más lento a medida que pasa el tiempo. Este rendimiento puede deberse a hábitos que relentizan tu Android.
Hábitos que relentizan tu Android
Aquí hay algunos hábitos que relentizan tu Android y consejos sobre lo que debe hacer en su lugar.
Instalación de muchas aplicaciones
Tener muchas aplicaciones instaladas en tu teléfono Android es una de las causas más comunes de rendimiento lento. Las aplicaciones requieren memoria y almacenamiento para funcionar. Como tal, más aplicaciones consumirán más de sus recursos limitados.
Cuantas más aplicaciones tenga, mayor será la cantidad de procesos en segundo plano y, por lo tanto, el rendimiento de tu dispositivo se verá afectado. Más aplicaciones también pueden ser una razón por la cual la batería de tu teléfono se está agotando tan rápido.
Un consejo para reducir la cantidad de aplicaciones es eliminar primero las que rara vez usas. En segundo lugar, elimina las aplicaciones de cualquier servicio al que aún puedas acceder en tu navegador sin inconvenientes. Puede ser una aplicación de redes sociales como Facebook o una aplicación de tu sitio de noticias favorito, entre otras.
Uso de aplicaciones pesadas que consumen muchos recursos
No todas las aplicaciones son iguales. Algunas consumen muchos recursos, mientras que otras son livianas y pueden ejecutarse incluso en dispositivos económicos con menos recursos.
Los culpables comunes son los juegos (especialmente los de RPG y Battle Royale), pero incluso las aplicaciones cotidianas como Facebook también pueden atascar el rendimiento de tu teléfono Android. Facebook y Snapchat son culpables particularmente comunes, y no los puedes perder en ninguna lista de aplicaciones populares que ralentizan Android.
Para resolver esto, opta por alternativas lite. Por ejemplo, Facebook Lite, la versión ligera de Facebook, pesa solo 1,6 MB, mucho menos que los 63 MB de la aplicación principal.
No actualizar regularmente las aplicaciones y el software del sistema
Las actualizaciones de software son fundamentales para garantizar que tu dispositivo funcione de manera adecuada y eficiente. Además, ayudan a corregir errores existentes que podrían estar causando que tu dispositivo se ralentice. Las actualizaciones también corrigen las lagunas de seguridad que hacen que tu dispositivo sea vulnerable a los atacantes.
Como tal, siempre debes instalar actualizaciones para tu dispositivo y aplicaciones tan pronto como estén disponibles.
Llenar el espacio de almacenamiento
Tu dispositivo debe tener espacio de almacenamiento libre en todo momento. Esto es importante porque las aplicaciones y el sistema operativo necesitan almacenamiento para ejecutarse, y las velocidades de lectura y escritura de las SSD disminuyen cuando están casi llenas. Entonces, si tiene menos espacio de almacenamiento, su sistema funcionará lento, lo que se traducirá en un rendimiento lento.
Una pantalla de inicio ocupada
Si bien no es común vincular una pantalla de inicio a un rendimiento lento del dispositivo, también influye.
Una pantalla de inicio con muchos widgets consume más memoria y puede atascar fácilmente tu Android. Mantenerlo simple y mínimo ayudará a liberar recursos.
No reiniciar tu teléfono con regularidad
¿Recuerda la última vez que apagaste el teléfono? Si no es así, es hora de que apagues tu teléfono para darle un nuevo comienzo.
No necesitas estar fuera de línea por mucho tiempo, simplemente reinicia tu dispositivo y listo. Esto también puede ayudar a corregir cualquier error que pueda estar experimentando.
Detención manual de aplicaciones
Cuando fuerzas el cierre de una aplicación y luego la inicies de nuevo desde el principio, será necesario trabajar más para volver a iniciarla. Android deja algunas aplicaciones para que se ejecuten en segundo plano para volver a entrar cuando las necesites sin problemas. Además, Android se encarga de la gestión de la memoria de forma automática, por lo que no tienes que preocuparte por eso.