Al menos nueve de cada diez padres se quejan de que sus hijos adolescentes pasan demasiado tiempo jugando. Los padres deben inculcar a sus hijos hábitos de juego saludables. Los niños, sobre todo en la adolescencia, se vuelven más rebeldes. Puede resultar difícil hacerles comprender la importancia de una vida sana. Hay que inculcarles un estilo de vida sano cuando son pequeños.
Sin embargo, debes hablar con tus hijos adolescentes sobre lo que es mejor para ellos. Debes hacerles saber cuáles son los límites. Hazles saber que, aunque jugar sea divertido, deben equilibrarlo con sus actividades físicas.
Hábitos de juego saludables
Aquí tienes cinco hábitos de juego saludables que los padres deben inculcar a sus hijos adolescentes:
Establece un límite de tiempo
Debes poner un límite al tiempo que tus hijos pasan jugando. No permitas que pasen más de una o dos horas jugando. Los juegos están diseñados, en cierto modo, para atraer a los jugadores y engancharlos. Por eso, debes ser firme con el límite de tiempo.
Además, debes dejar claro a tus hijos que no pueden jugar en horario escolar o de estudio en casa. Debes tener en cuenta que los juegos móviles han hecho que sea fácilmente accesible para los niños jugar juegos en cualquier lugar y en cualquier momento.
Jugar al aire libre es importante
Los niños necesitan jugar al aire libre. Esto se debe a que un cuerpo humano sano requiere movimiento físico. Cuando los niños juegan, su mente trabaja regularmente, pero su cuerpo no. Un cuerpo no activo puede caer fácilmente presa de las enfermedades y el agotamiento. Haz ejercicio con tus hijos, ya que inculcará hábitos de juego saludables en su familia.
Haz que pasen tiempo de calidad con la familia
Pasar tiempo con la familia es una forma estupenda de relajarse. Los niños que desarrollan adicción al juego o patrones poco saludables tienen una pésima relación con la familia. Estos niños se aíslan sólo en su mundo de juegos.
Nada de videoconsolas en el dormitorio
Sigue esta regla a rajatabla con tus hijos. Si tienen la videoconsola en el dormitorio, es probable que caigan en la tentación de jugar antes de acostarse o por la noche. Esto perturbará su rutina de sueño.
Haz que socialicen
Como he mencionado antes, los niños que no se relacionan con sus amigos y familiares son más propensos a la adicción a los juegos. No sólo debes pasar tiempo con ellos, sino también asegurarte de que mantienen una buena relación con sus hermanos. También puedes invitar a sus amigos a estudiar o simplemente pasar el rato con ellos.
No dejes que las videoconsolas hagan de canguro
Uno de los errores más comunes de los padres es dejar que los móviles y los juegos hagan de canguro de sus hijos. Si tus hijos se sienten mal o están estresados, no les dejes jugar para que se recuperen. En lugar de eso, habla tú con ellos. Los vídeojuegos nunca deberían ocupar el lugar que te corresponde como padre.
Recuerda, son simple entretenimiento y con suerte algunos también son educativos, pero nada más. Por lo tanto, los juegos no deberían absorber el tiempo de tu hijo.